Serie: Caballo de Fuego
Libro: 01
Autora: Florencia Bonelli
Género: Romance Histórico
Año de publicación: 2011
Protagonistas: Matilde Martínez y Eliah Al-Saud
::Argumento::
La historia comienza el 31 de Diciembre de 1997
Eliah Al-Saud es un hombre excéntrico y poderoso, emparentado con la familia reinante de Arabia Saudí. Vive en París y dirige una empresa de seguridad que, en realidad, oculta actividades de defensa y de espionaje ofrecidas al mejor postor. Matilde Martínez es una joven pediatra argentina que sueña con curar a los niños más desfavorecidos y trabajar para una ong en el África. El destino la pondrá en el camino de Eliah, y será en París donde la atracción que se inspiran los unirá. Sin embargo, los secretos que ambos guardan celosamente pondrán en riesgo no sólo su amor, sino sus vidas. En el marco del siempre latente conflicto palestino-israelí y con una amenaza atómica como telón de fondo, Matilde y Eliah vivirán una aventura que los llevará a recorrer el mundo y los enfrentará a los peligros que acechan a quienes se atreven a desafiar a los imperios dominantes.
::Comentario::
Que puedo decir… el protagonista es el hijo del matrimonio de mi segunda novela favorita de Florencia Bonelli. Lo único que puedo criticarle a Eliah es que me hubiera gustado que fuera un poquito más musulmán, al fin y al cabo es el hijo de un príncipe Saudí. Pero, claramente todo lo que hace no está muy relacionado con su religión. La forma en que estos dos protagonistas se conocieron es de lo más interesante. Casualidades del destino. Me encanta que se vuelvan a presentar todos los protagonistas de “Lo que Dicen tus Ojos”. Volverlos a leer, ahora que ya son gente grande, con sus vidas vividas… me encanta. Y que además, las cosas que vivieron y como las vivieron, terminen afectando a la joven pareja, incluso sin saberlo, es genial. Al final el destino terminó uniendo a Francesca y Aldo de alguna manera. Cuando terminé de leer “Lo que Dicen tus Ojos”, tenía la esperanza de que Aldo lograra ser feliz, que tuviera una vida feliz, a pesar de lo que le hizo a Francesca. Claramente no fue así. No queda de un pedacito de ese joven muchacho enamorado de la hija de la empleada de su casa. Pero volviendo a esta novela. El entramado político/histórico en el que están envueltos todos los personajes es alucinante. Todos tienen una historia retorcida y están conectados de alguna manera aunque ellos no lo sepan. La historia de Gérard Moses es wow. Está rematadamente loco. No sé si será la enfermedad o si él ya estaba loco y la Porfiria solo lo puso peor, pero wow. Se ocupó de destruir a todas las mujeres por las que Eliah sintió algo. Claramente si a Celia no le hizo nada, es porque sabe que no siente nada por ella. Cuando el joven Al-Saud se entere todo lo que hizo su supuesto mejor amigo… y de lo que le quiere hacer a Matilde… se va a volver loco y va a hacer hasta lo imposible por destruirlo. Creo que mi personaje favorito es Juana. Es divertida, chispeante, la tiene muy clara y es una amiga incondicional. El amor fraternal que le dedica a Matilde es impresionante. Hay veces que los amigos de la vida son mucho más hermanos y familia que aquellos con los que tenemos lazos sanguíneos. Los comentarios de Juana, sus apodos, su intervención en el momento justo y con las palabras justas… la convierten en mi personaje favorito. Y que haga pareja con Shiloah Moses, el verdadero mejor amigo de Eliah… es la cereza del postre. Realmente hermoso. Pobre Shiloah, el hermano que tiene… le destruyó la vida y ahora quiere también acabar con su vida. Cuando se entere de que anda noviando con Juana… también la va a querer matar a ella. Por lo que Juana y Matilde van a estar bajo la pistola de un mismo asesino debido al amor que sienten por dos hombres. Cada vez que lo pienso, no puedo creer los horribles momentos que vivió Matilde. No solo lidió con el desprecio de toda su familia, con la falta de un padre que nunca estaba y que luego calló preso, con la obligación de casarse con alguien por quien no sentía nada, con ser víctima de una terrible violación a manos de su marido sino que además sufrió un cáncer devastados en el que debieron sacarle todo su sistema reproductivo y a pesar de eso aún tiene chances de que vuelva. Es horrible y triste, muy triste. Si no se hubiera encontrado con estos dos amigos que le dio la vida, no sé si podría haberlo soportado. No sé si alguien podría haberlo soportado. Y de Eliah… que decir de Eliah. Por más que sea el mejor de todos, el más lindo de todos, aquel por el que todas nos derretimos, definitivamente metió la pata una vez atrás de la otra. Todas sus mentiras u omisiones explotaron juntas, al mismo tiempo. ¿Cómo se te ocurre pedirle casamiento a una persona a la que no le contaste cuál es tu profesión? ¿Cómo le vas a pedir matrimonio a alguien a quien no le dijiste que habías tenido una aventura con su hermana? Ni hablar de que se conocen hace algunas semanas. Sin duda, el rol de Eliah en su trabajo me encanta. Los detalles que maneja Florencia en relación con la historia del momento, los acontecimientos presentes, los conocimientos tan detallados sobre cada tema, es increíble. Leí muchas novelas románticas y la verdad es que nunca encontré una en la que la historia de fondo fuera tan bien investigada, explicada y analizada. El marco histórico está diseñado a la perfección al igual que relatado. Las explicaciones sobre temas como el tráfico de armas o el coltán se entienden perfectamente y ayudan a que el lector tenga aunque sea un mínimo conocimiento sobre temas que tal vez no suele leer. Así que, de alguna manera la siento como una novela que aporta otras cosas que el romance y entretenimiento. La verdad es que se movió bastante rápido para lo que suelen ser las novelas románticas. Todos los mayores secretos de los protagonistas explotaron, ahora lo que sigue son las artimañas que van a usar los otros para destruirlos. Como palabras finales tengo para decir que ame el libro. A sus personajes, todo. Pero sobre todo el trabajo de investigación que hace Florencia para darle un marco histórico y profundo a esta novela.
Lizzy's para Caballo de Fuego. Paris:
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